"Oh Espíritu Santo, alma de mi alma, yo te adoro:
ilumináme, guiáme, fortaléceme, consuélame,
indícame lo que debo hacer, dame tus órdenes,
yo te prometo que me voy a someter a todo lo que deseas de mí,
y que voy a aceptar todo lo que tu permitas que venga a mí.
Haz solamente que conozca tu voluntad. Amén".
Autor: Cardenal Desiderato Mercier (1851 - 1926)
Transcrito: Cristobal Aguilar.